Cuerpo desnudo
ante la
niebla
alba
reclinada en el espacio
senos de
vapor
paralelos
en escenas de
rostros milenarios
Como aroma
ante los ojos
que se nublan
solitarios
me respira el
cuerpo
que fui
Perdido en
este laberinto
de andar
a media luz
abrazo una imagen
una
transparencia
que fue
sombra
hasta
desentrañar los ojos
evaporar las
manos
y arrancar
del aire
la ausencia
de materia.
Beatriz Osornio Morales